Bona al borde de un Jury. A pesar de que preopinó , rechazó la recusación y no corre traslado . Una vergüenza y un bochorno institucional contra la periodicidad de mandatos

Bona al borde de un Jury. A pesar de que preopinó , rechazó la recusación y no corre traslado . Una vergüenza y un bochorno institucional contra la periodicidad de mandatos

La Jueza Poggista María Eugenia Bona, quedó al borde de un pedido de Jury, frente al rechazo de una recusación planteada por Fiscalia de Estado por haber preopinado y violentar la periodicidad de mandatos.

En ese sentido , El fiscal de Estado de San Luis, Roald Cattáneo, explicó que la recusación contra la jueza Laboral N°2, María Eugenia Bona, que se presentó este jueves fue “con causa” porque, entienden en la Fiscalía, la magistrada “preopinó” en el marco de la tramitación del amparo para frenar la obra pública en la Provincia que solicitó el gobernador electo, Claudio Poggi.

El jueves, la Fiscalía apeló la medida cautelar dictada por la jueza Bona, en esa causa, que ordenó al Ejecutivo provincial suspender contrataciones, licitaciones y adjudicaciones de obras públicas hasta el 9 de diciembre, último día de Gobierno de la actual gestión Y recusó a la magistrada.

“Entendemos que ella no puede seguir entendiendo en el amparo porque ya adelantó opinión”, indicó Cattáneo, y aclaró que la recusación no se funda en la medida cautelar, que es un instrumento precautorio, pero no resuelve la cuestión de fondo.

 

“La jueza, en declaraciones periodísticas y el algún portal, adelantó opinión con el resultado del amparo. Hasta ahora, el amparo no está resuelto, a nosotros no nos han corrido traslado y no hemos contestado. Lo que atacamos fue la cautelar”, especificó el fiscal.

Bona rechazó la recusación, que avergüenza al Poder Judicial, actuando casi como parte, por lo que seguirá su trámite normal, mientras continúa la vigencia de la medida cautelar. “La apelación no suspende esa medida”, indicó.

Hasta que esa apelación se resuelva, la medida cautelar mantiene sus efectos; es decir, si no se revoca, el Gobierno no continuará con la programación de licitaciones y adjudicaciones prevista para las próximas semanas.

Cattáneo señaló que esperan que la situación se “resuelva con la mayor celeridad posible”.

 

Y volvió a cuestionar la medida de la jueza Bona: “Viola la periodicidad de los mandatos: el mandato empieza cuando asume, no antes.

A la jueza se le ocurre que dos o tres meses antes la administración que ejerce el Poder Ejecutivo tiene que dejar de administrar porque va a venir otro Gobierno”., lo que es una cuestión ridícula.